Equipo: Pablo Pérez Palacios, Emilio Calvo, Miguel Vargas, Marcelino Pacheco, Jonathan Resendiz, Andrés Domínguez, Nancy Estévez, Laura Morales
Fotografía: Fernando Marroquin
La casa está hecha para descubrirse, como se hace al subir una montaña: sólo hasta que subes al área social en el último piso, descubres la vista del terreno en toda su longitud.
Una casa para ser descubierta
Echegaray es una residencia que surge de un terreno de piedra y, de la misma forma, el proyecto es una piedra sólida de color negro con un pabellón de madera encima. Lo oscuro y cerrado del área privada, que representa la piedra del terreno, y lo ligero del área pública con una vista panorámica.
Los materiales que se usaron son naturales y la excavación del terreno fue mínima. El programa arquitectónico responde a estas intenciones, por lo que se tomó la decisión de cambiar el orden convencional del programa al colocar el estacionamiento en la planta baja, el área de dormitorios en el primer nivel y el área pública en el último, de esta forma se crean velos de luz.